La Mujer que más poder ha disfrutado en el Imperio Romano, siempre después de
Livia, esposa de César Augusro. Su nombre es Julia Domna. Julia Augusta, esposa
del emperador Lucio Septimio Severo, 193-211 d.C.
Hay que destacar que el emperador era un general, un jefe del ejército romano y ella
lo acompañaba en todas sus campañas de guerra. Era normal verla en los campamentos
organizando y aportando sus conocimientos, que eran abundantes, sobre la disposición
del campamento y su estructura. Una mujer muy inteligente, sabia, entregada a su esposo
en cuerpo y alma. Hasta entonces solo la prostitutas acompañaban al ejército hasta que
Julia Augusta decidió estar al lado de su esposo. Una decisión compleja pero en aquellos
tiempos de crisis, el Senado de Roma lo aceptó por la fuerza del emperador, además
le concedió el Título de "Madre del Campamento" para que todo el Imperio Romano
de oriente a occidente supiera la valentía de su emperatriz.
La Colonia Augusta Gemella. Martos. Reconoce esta excelsa dignidad que la ensalza
además del título de Augusta del Imperio.
Julia Augusta venció los terribles prejuicios que dominaban las mentes de los romanos,
fue una mujer inmensa en su realidad personal y ni siquiera Livia , esposa de Augusto,
 se atrevió a acompañar a su esposo en campañas bélicas. Una mujer excepcional
en Roma, y nosotros en Martos, tenemos la suerte de conservar una bella inscripción
dedicada a ella, como Augusta y Madre del Campamento. Un tesoro de nuestro pasado
que ha llegado hasta nuestros días en el zócalo de epigrafía latina de la antigua
Cárcel y Cabildo de Martos.
Una mujer que tuvo en sus manos el poder, cuando Roma entraba en su ocaso,
cuando la gran crisis llamaba a sus puertas. Una gran mujer.