Las llaves del Reino de Dios.
Soy un admirador de la palabra y la obra del querido Papa Francisco.
Pero la lectura del Evangelio de Mateo de este domingo, me resulta extraño.
En mi opinión atar y desatar en la tierra y en el cielo es cosa de Dios y solo
de Dios. Además creo que las llaves del Reino están en manos de Dios.
Y la Roca es Jesús, la roca poderosa que vence a la muerte.
Creo que Dios es el Maestro de la Historia, el conocedor de todo el devenir
del Ser Humano. Por eso mismo creo que sería terrible conocer y crear una
Iglesia que durante siglos ha sido enemiga de los pobres y necesitados. Iglesia
unida al poder terrenal, alejada de la Buena Noticia de Jesús.
La Venerable Iglesia tan alejada de Jesús, aceptó dinero por indulgencias,
por el perdón de los pecados, por disminuir o reducir la estancia en el purgatorio.
La Venerable Iglesia participó en la explotación de los pobres, de los necesitados,
de las personas que esperaban en Dios.
Es muy triste aceptar la realidad histórica y dudo mucho que Jesús dejara las
llaves del Reino de Dios en manos humanas.
Y solo de pasada nombrar al burdel del Papa en Roma, en los palacios
papales durante mucho, mucho tiempo.
Mateo, 16, 13- 20.