Se acaba Agosto y yo recuerdo a mis Padres. Mis Padres que tanto me amaban.
Los dos unidos eran el Cosmos de mi vida. Mi Madre era la columna poderosa,
elevada sobre mi realidad absoluta, era el cimiento de la obra posterior. Mi Madre,
y sobre todo su abrazo era el más íntimo, más profundo, todo mi Universo giraba
alrededor de una estrella que en mi corazón era mi querida Madre.
Debo reconocer que a mi Padre, el tiempo le tenia reservado su espacio, su lugar
especial y extraordinario. Creo que cuanto más me parecia  y heredaba su sensibilidad
más lo amaba, era el cimiento de todo mi Ser. Era el pilar de toda una verdad personal
que era creadora, amante de escribir, de sentir, de conocer con excelso deseo.
Dos Universos unidos, entrelazados , eso eran mis Padres, dos universos que dan a luz
vida y más vida, entre ellos yo, mi humilde persona.
A pesar de ser mi querida Madre mi Cosmos y mi Universo , mi querido Padre era el
poder interior, el agua que fluye muy dentro, en los cursos de agua profundos, alejados
de la superficie.
Imagen de Jesús Cautivo. un foto muy querida por mi Padre en los tiempos que se entregaba
a una Fe intensa, poderosa, dulce. Su Fe en Jesús , siempre fue generosa, fuerte como nuestra
Roca Encantada.