Martos, la antigua Tucci, la venerable Colonia Augusta Gemella. Martos,
la Ciudad de la Roca Encantada, cubierta por un manto invernal.
Martos es ciudad para reposar y escuchar antiguos relatos, historias del pasado
junto al fuego del hogar. Relatos de antaño, que se recrean en el amor intenso
a los fuertes cimientos de una ciudad encantadora como la gran roca que la eleva
y sostiene con el poder de naturaleza. Historias de enamorados que nos regalan
su dulzura, su visión clara y serena de las sendas estrechas, pendientes, radiantes
pues conducen al cielo. Y para todas y todos Martos reverdece, abre su lecho
a una primavera portentosa, llena de fuentes, manatiales y pozos rebosantes
de agua fresca para saciar la sed. Y para todas y todos, la Roca es verde sobre
la tierra, sobre el horizonte que la contempla enamorado de su belleza excelsa.
Las nubes son como el algodón dulce y descienden desde la roca hasta la ciudad
con ímpetu conquistador. Ven a Martos a sentir estas emociones, sensaciones
admirables que brotan del interior de esta tierra predilecta de los dioses.