sábado, 30 de julio de 2016

Inmensa la Palabra de Francisco esta tarde en Cracovia.
Sublime su Mensaje profundo, claro, directo, verdadero.
Un placer escuchar y aprender de una Persona entregada.
En mi opinión, Francisco lleva una pesada Cruz a sus espaldas.
Una Cruz muy vieja y sólida que aplasta y hiere con solo mirarla.
Francisco abraza la Cruz de las alturas de la Iglesia Católica.
Francisco acoge la Cruz de siglos de poder y sobre todo
de siglos de ir en contra, siempre desde las alturas, de su propia
Esencia y Mensaje.
Por eso mismo, por su enorme valentía, admiro a Francisco.
Lo admiro profundamente por ser consciente, por aceptar
de forma clara y contundente que es portador de una Cruz
que no bajó del Cielo, pues fue creada en la misma tierra
y dentro, muy dentro del seno de esta Iglesia que Francisco
con tanta sinceridad y humildad guarda en su interior.



No hay comentarios:

Publicar un comentario