20 de Junio. Día Mundial de los Refugiados.
Las Tierras Hispanas, desde 1492, han sido triste fuente de refugiados.
Los Judíos hispanos fueron expulsados de su tierra y de sus casas para
alcanzar una unidad religiosa que de forma terrible, arrancaba de su hogar
a personas que amaban intensamente a la tierra que los acogió al nacer,
a ellos y a sus antepasados. Igualmente y a partir del mismo año 1492,
surgen los refugiados hispano musulmanes del Reino de Granada. Nefastas
Capitulaciones jamás respetadas para la población islámica que Boabdil
deseaba proteger a pesar de la rendición.
Ya en el Siglo XVII, se produce otra fuente de refugiados desde estos Reinos.
La Expulsión de los Moriscos. Por desgracia se ordenó la expulsión de unas
personas capaces en muchas actividades creadoras de riqueza y desarrollo
económico. Un desastre para los reinos hispanos, cuando la crisis mostraba
sus garras en el reinado de Felipe III.
España es fuente de refugiados por motivos religiosos, durante mucho tiempo,
el desenfreno de la unidad religiosa unida a la política era fuente inagotable
de refugiados. Después en el Siglo XIX, los partidarios de la renovación
y las reformas de un Estado de Piedra, asentado en el pasado. Entre muchos
está Don Francisco de Goya. Maravilloso y triste, muy triste, Goya en Burdeos.
En el Siglo XX, España es una fuente de lágrimas en su terrible guerra civil.
Enorme exilio que deja a la nación desolada, arrasada de cultura. Terribles
campos de concentración de refugiados en el sur de Francia.
Lágrimas de Antonio Machado en Colliure.
Con esta reflexión solo recordar que España es tierra de refugiados y por eso
debemos ser más sensibles a las penalidades de las personas que se ven
obligadas a dejar su tierra y sus casas.