viernes, 1 de abril de 2016


De la Venerable Diócesis de Tucci. Martos.
En el Museo Arqueológico de los Padres Franciscanos en Martos. Museo que atesora
la Colección Arqueológica del Padre Alejandro Recio, podemos contemplar una copia
excelente del Sarcófago Romano Paleocristiano de Martos. Un Sarcófago que se muestra
en el Museo Provincial de Jaén.
En el año 325 se celebró el Concilio de Nicea. Ciudad de Asia Menor, en la actual Turquía.
Dos ejes fundamentales dan vida a este gran Concilio. Por un lado la necesidad
de Constantino I de apoyarse en una Fe única y fuerte que apuntalara a un Imperio
en peligro de descomposición. Aunque en realidad para Constantino I todo era política
pues no se convirtió hasta poco antes de morir.
El segundo eje se centra en Jesús. Hijo de Dios y ahora de la misma Naturaleza,
de la misma Sustancia que el Padre. Es decir Jesús es Dios por Naturaleza y Sustancia.
El Sarcófago de Martos es un claro reflejo de esta Idea Central de Nicea.
Jesús aparece como divinidad que ha tomado carne en este mundo. Con el Poder
de ser Dios manifiesta esa realidad en la curación y en la resurrección de los muertos.
Una preciosa pieza de nuestra historia para conocer y aprender como el Ser Humano
tiene la enorme capacidad de crear y elevar hasta el mismo Cielo.
Todo depende de su necesidad y como se suele decir "La Necesidad es Virtud".

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