Ara Funeraria Romana. Colonia Augusta Gemella. Martos.
El Inframundo y los Antepasados Difuntos
en el Pensamiento Romano. En un mundo que miraba
a los dioses, grandes y pequeños como seres que habitaban
y disfrutaban del gran privilegio de la Eternidad, siempre
generosa, abundante y llena de poder sobre la humanidad.
La Personas los adoraban con cierta distancia, alejados
de sus Gracias tan difíciles de alcanzar.
Por esta razón, en la "Vida y en la Muerte" confiaban
en la ayuda de los Antepasados que habitaban el complicado
y a veces oscuro "Mundo de los Muertos". Pensaban que
se extrañaban y recordaban mutuamente y que conformaban
la única esperanza para encontrar un poco de consuelo
después de la muerte.
Tan fuerte y arraigada estaba esta creencia en el Mundo
Romano que el mismo Cristianismo, en expansión por todo
el imperio ya desde la segunda mitad del Siglo I y sobre todo
en los siglos II y III d.C., les presentó como "Modelo a seguir"
a un Nuevo Dios que conoció la muerte y el sepulcro. Un Dios
que después surgió Resucitado de entre los muertos.
Es la Semilla del Triunfo posterior del Cristianismo en el
Imperio Romano.
Jardín de la Casa Municipal de Cultura en la Ciudad de Martos.
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