Recuerdo cuando era un niño y saciaba la sed en los leones que no cesaban de regalar
agua fresca y saludable. Entonces la Fuente Monumental reposaba, adosada a los muros
del antiguo Templo de San Francisco. Magnífico Pilar de la Fuente Nueva como todos
los marteños lo conocemos. Un Águila Real se eleva y en sus garras poderosas
lleva el Escudo de la Excelsa Monarquía de su Majestad Católica Don Felipe II.
Sus inmensas alas abiertas le dan el poder de volar sobre todos los reinos y posesiones
de una monarquía enorme, grande, extensa y muy amada.
Pero siempre regresa el águila a su nido, a su hogar, a Martos. Siempre vuelve
a la Fuente Monumental ta querida y a la Roca Encantada. Y siempre en la memoria
su creador, Francisco del Castillo "el Mozo". Amante y Amado de Martos.