Desde niño me ha llamado la atención el mundo prodigioso de los Exvotos
colocados junto a una determinada imagen de Jesús, la Virgen María o los Santos.
Piernas, brazos, ojos, cuerpos completos normalmente realizados en plata
y más recientemente fotografías de personas concretas. Es una dimensión especial
de la Religión y de la Fe que viene de muy lejos en el tiempo. Los Exvotos para pedir
a la divinidad una determinada Gracia eran muy populares en todo el mundo
mediterráneo antiguo. Grecia y Roma y por supuesto en la cuna de la civilización,
Mesopotamia y Egipto.
En Martos, con el paso del tiempo han desaparecido de muchos templos pero
permanecen junto a esta imagen de Jesús crucificado en el Templo de Nuestra Señora
de la Villa.
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